La alcaldesa de San Juan, Carmen Yulín Cruz, enfrentó este martes a sus críticos, y defendió el préstamo de $120 millones que solicitó su administración para paliar la crisis fiscal que arrastra el municipio, y reiteró que sin esa transacción no hubiese podido pagar la nómina al cierre de este mes.
La Legislatura Municipal aprobó la noche del lunes concederle al gobierno de San Juan un adelanto del empréstito por $30 millones, que servirán, entre otras cosas, para pagar parte de la deuda que dejó el exalcalde Jorge Santini con los suplidores, obligaciones que en enero superaban los $150 millones.
"Los que están criticando deberían pedir una reunión conmigo para ponerse a trabajar. Tenemos que pasar, en este país, de la confrontación a la colaboración, de la crítica a la idea. Lo cierto es que no había dinero en el Municipio de San Juan para pagar la nómina el 30 de marzo", afirmó la Alcaldesa en un aparte con la prensa, tras reunirse con el gobernador Alejandro García Padilla en La Fortaleza.
"No hay dinero porque el municipio no administró bien los haberes del pueblo, porque el municipio anterior le dejó $157 millones en deudas a suplidores", abundó Cruz.
Durante el encuentro, García Padilla y Cruz discutieron los planes para establecer una panificadora en la barriada La Perla en el Viejo San Juan, mediante una Alianza Público Comunitaria.
Cruz dijo que el déficit operacional en San Juan asciende a $85 millones, y señaló que la pasada administración también sobreestimó los ingresos del ayuntamiento con miras a inflar el presupuesto y utilizar más del 50% que le correspondía.
Durante los años fiscales en los que se celebran elecciones generales, el gobierno incumbente está impedido por ley de gastar más del 50% del presupuesto durante el primer semestre para dejar igual cantidad de recursos para los próximos seis meses ante la posibilidad de un cambio de administración.
"Usted (Santini) sobreinfló los ingresos para poder hacer legal lo que es ilegal, que es gastar más del 50%", subrayó Cruz.
La Alcadesa dijo la semana pasada a El Nuevo Día que el préstamo de $120 millones se tomaría a la banca privada con la autorización del Banco Gubernamental de Fomento, y se emplearía para pagar a suplidores, deudas y sobregiros.
Anticipó que, conjuntamente, pondrá en vigor un estricto plan de control de gastos y un programa para identificar evasores contributivos.
0 comentarios:
Publicar un comentario