El presidente del Senado Thomas Rivera Schatz, aseguró que no tiene que disculparse por el cierre de las gradas durante los días finales de la sesión legislativa porque, a su juicio, no erró. Además, afirmó, que si lo estima necesario volvería a prohibir el acceso al área para mantener el orden y el decoro.
"No (tengo que pedir perdón), porque los periodistas han tenido acceso. Yo entiendo que no he hecho nada malo; por eso no tengo que pedir perdón", dijo Rivera Schatz.
Al mismo tiempo, reiteró que no es un capricho suyo cerrar las gradas. "Es mi responsabilidad mantener el control y la protección de las gradas para todos los senadores. Sin van a desordenar y entorpecer, no pueden entrar", dijo.
A preguntas de si volvería a cerrar las gradas, el líder senatorial indicó que, "sí, si las circunstancias lo requieren, para mantener el orden y el decoro". Asimismo, explicó que lo qué provocó el cierre fue un hecho aislado con un fotoperiodista que atendió porque así el reglamento del Senado se lo permite; reglamento que "fue avalado por la minoría popular".
No obstante, Rivera Schatz resaltó que todavía está en pie la invitación a los directivos de los medios de comunicación para entablar un dialogo y así "zanjar las diferencias". "Estoy dispuesto al dialogo", aseveró.
lunes, 12 de julio de 2010
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